miércoles, 24 de agosto de 2011

La socia PAULA LABEUR elaboró la reseña del libro...

 
 
Tobías Wolff, Vieja escuela, Buenos Aires, Alfaguara, 2010. 264 pp.

“Todo va bien. Esa era la última frase del relato, aquel relato en el que nada iba bien.” nos dice el protagonista de la novela.
Y como en ese relato, en el mundo del texto de Tobías Wolff nada va bien.
Tres veces al año, un escritor reconocido y prestigioso visita la “vieja escuela” que da título a la novela, una escuela que confiesa como única marca de snobismo, ser un lugar donde se valora la literatura. Los alumnos del último año participan de un certamen literario en el que deben presentar un texto propio que, de resultar elegido por el visitante, será el pasaporte para una audiencia privada con el autor huésped en la que –lo sabremos después- no siempre el ganador verá colmadas sus expectativas.
El comentario de los textos presentados, los modos en los que los alumnos los producen, las discusiones y rencillas internas, las palabras esperadas de los escritores reconocidos,  lo que se dice y lo que se oculta, nos permite adentrarnos en los múltiples modos de leer que recorren la escuela (y posiblemente el interior de cada uno de nosotros, lectores): habrá que admitir que no proclamamos algunas cosas que nos gustan ni nos gusta todo lo que ciertas autoridades en la materia dicen que debería gustarnos. Modos lineales y paródicos de lectura, a su vez, ponen en cuestión qué es eso que se juzga valioso y cómo puede caer rápidamente en el desprestigio.
Y allá caerá el narrador cuando se descubra el bochornoso plagio en el que incurrió y al que lo vemos llegar lentamente de la mano del método que inventa para destrabar su propia escritura: copiar, volver a tipear literalmente, una obra famosa para sentir lo que hubiera sentido su autor al momento de escribirla. Y sentir tanto y tan bien como para llegar a pensar que uno es aquel y aquel es uno. Y entonces ¿quién podría afirmar que uno está mintiendo?
El plagio acelera los tiempos del relato y los hechos se suceden cada vez más rápido. De un plagio como una mentira que se presenta como verdad vendrán escalonadamente otras que solo se develarán mucho más tarde cuando ya es bastante tarde para todos, cuando la trama de verdades y mentiras, de ficciones y realidades se hace difícil  de desmadejar y cuando ya no es posible pensar que algo vaya bien.

Tobías Wolff es profesor de la Universidad de Stanford, publica en diarios y revistas literarios y es autor de novelas y cuentos.

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